En una muestra de las ganas que constantemente muestran las fuerzas policiales por usar sus juguetes, en Nashua, New Hampshire, una mujer ha sido electrocutada al ser disparada con un taser cuando insistió en comprar más iPhones 5 de los que se le dijo que estaba permitido, pues ya había comprado dos pero ella quería más unidades. La cosa se complicó y comenzó a grabar un vídeo de clientes comprando unidades supuestamente por encima del límite. Al poco tiempo se presentó la policía, que redujo la gran amenaza para la seguridad gracias a un arma de electrochoque o taser, arma en muchos casos letal (aunque en principio no lo sea), pues según datos de la wikipedia, entre 2001 y 2007 han muerto 269 personas a raíz de un disparo de taser.