El problema es cuando se llama piratería a lo que no lo es. Tratándose de compartir (que es lo que es el p2p) todos somos piratas desde el mismo momento en que le hemos prestado o hemos tomado prestado algún libro, disco de música, juego etc a nuestros amigos, familiares etc.
No es casualidad que se pretenda cambiar el negocio hacia la desaparición del formato físico, para que cada contenido vaya ligado a un reproductor en cuestión y ya no puedas ni dejarle una peli o un juego a tu vecino del quinto.