Houston, tenemos 2 problemas serios: El primero es que tenemos una fuerte atracción sobre dos términos que no tienen por que ser compatibles, son el de «internet» y «gratis». Y por otra parte ese que explicado de una forma rápida es «no vale nada, pero ves sacando la tarjeta».
Dos problemas que tienen nombre y apellidos, los pagos in-App que tanto conocemos en aplicaciones móviles.
Por que ¿quién no se ha tirado de los pelos al saber que el Whatsapp pasaba a ser de pago? Aun sabiendo que no te hará falta pedir un crédito tras gastarte los 599€ del iPhone, imagino que 0,89€ anuales no supondrán un problema para tu bolsillo. Pero somos un poco ratas y eso (disculpar la expresión) jode.
No se quien fue el inventor de esta asociación y de hecho pienso que, por lo menos los que somos castellano parlantes seguro que alguno con pocas trazas del idioma anglosajón, confundió aquello de Internet Free como gratis.
Os quería preguntar ¿cuánto es lo máximo que habéis pagado por una aplicación?
Yo os puedo decir, 8 €. Y sí, estuve dudando casi día y medio por ello, no lo niego. Me costaba hacer esa compra por una aplicación, aunque no me costaría comprar 8 € por un buen bolígrafo, por decir algo. Pero somos así.
¿Y música? ¿Habéis comprado música? ¿Sabéis cuando compré yo mi primera canción de iTunes?
Cuando vi que era más rápido, cómodo… comprarla que buscarla y buscarla y buscarla… Era una canción realmente difícil de conseguir.
Si pensáis como usuarios, seguro que esos 0,89 no os supone una gran cosa después de haber desembolsado los 500 del iPad.
Y si lo hacéis como desarrolladores, aunque sea por un día, pensar que el mercado no es tan jugoso como se muestra. Os comento. El desarrollo de un juego aproximadamente (por supuesto depende de que juego) puede estar en el mercado en torno a los 8000 – 9000 €. Precio de mercado.
Si calculamos con algún juego de 0’89€, se necesitan del orden de 10 mil descargas para que la aplicación salga rentable y creerme que no es tan fácil.
Entonces, a alguien se le ocurrió la genial idea de sacar algo intermedio. No cobremos por la aplicación, que se la descarguen, que la tengan en sus dispositivos… y cuando estén enganchados… ¡zas! Pago al canto (también conocido como pagos in App)
Ya no sólo se trata de juegos sino de aplicaciones en general que tienen una parte Premium de pago in-App, dentro de la aplicación.
Eso hace que los usuarios si quieren sacarle todo el provecho tengan que desembolsar, cuando la aplicación en teoría era gratuita, un coste adicional por algo.
Esto pasa por dos cosas:
La primera, me remito a mi primer punto, a que pocos pagarían por esa misma aplicación a 2,99 €, por ejemplo, pero si es gratis la descargo.
Y la segunda, por que todavía no han entendido las grandes tiendas como Apple Store o Google Play no permiten la muestra de aplicaciones o las versiones Trial o similares… donde poder ver durante un tiempo adecuado si la aplicación vale o no la pena.
Bajo mi punto de vista, a veces hacemos daño a la propia industria informática y en concreto a la que ha apostado por aplicaciones móviles al:
- No querer pagar una aplicación, aun sabiendo que es beneficiosa para nosotros y buscar una alternativa gratis quizás no tan completa.
- No valorar la aplicación, ayudando así a desarrolladores y otros usuarios.
- Tener el pensamiento del «yo no pago» y querer que las mejores aplicaciones las podamos obtener mediante, digamos procedimientos poco legales.
Las compras in-App son al final una medida, no se si para vosotros mejor o peor, de que la gente pueda descargar una aplicación, valorarla, probarla… y conseguir ese modelo Premium a un precio bien razonable o incluso superior, dado que en muchos casos lo que se hace es fraccionar esas partes de pago, que sumando todas las opciones superarían incluso el precio de venta de la misma aplicación de Pago en un modelo normal.
Por lo tanto, el modelo in-App , como decía al principio, creo que es un modelo que nosotros mismos nos hemos buscado. En algunas ocasiones se abusa de este modelo, sobre todo en juegos donde conseguir un carro de bayas rojas te hará subir puestos para construir una casa en «Los Pitufos», pero en el caso llamémoslo del resto de aplicaciones que han sido construidas, por que no decirlo, para ayudarnos en el día a día, tiene un sentido y debemos ser justos con el desarrollador y trabajo que eso ha conllevado y por lo tanto, el retorno debe ser consecuente para no hacer decaer esta joven y por otro parte atractiva industria de las aplicaciones móviles.
Comprar aquello que queráis y de esta manera dignificar el trabajo bien hecho.
Personalmente suelo pagar por las aplicaciones aunque también es cierto que me lo pienso antes de pagar un par o tres de euros por una buena aplicación. Pero creo que he ido un poco más lejos incluso: yo he llegado a pagar dos (2) veces incluso por una misma aplicación. De hecho por un juego: Real Racing 2. Y no 1 mísero euro, 8 que en total ya son 16€.
Algunos pensarán que estoy un poco zumbado y muchos otros que no debo ser normal, pero si me paso horas y horas jugando con un juego que realmente me gusta (y soy de los que suele abandonarlos al poco de probarlos), ¿por qué no agradecer en cierta manera a los desarrolladores su esfuerzo de nuevos coches, competiciones, retos…?
Hay que valorar el esfuerzo de los demás, porque para los que podamos pensar que esta o aquella aplicación es una porquería, detrás ha habido un desarrollador o grupo que se han estado trabajando duramente para sacarlo al mercado. Quizás no tengan éxito en la mayoría, pero la cosa cambiaría si para los que les resulta útil o bien se diviertan pagasen.
Yo lo de los pagos in-app lo veo una buena opción para apps que son gratuitas de forma limitada y si te gustan y quieres aprovecharla al máximo, pues pagar lo que sea. Y en juegos pues igual, dos o tres niveles free y si te gusta, pagas. Yo lo veo bien. Más que tener que bajarte una versión lite y si te gusta, pagar por otra. De hecho, creo que es una mejor manera de animar a la gente a pagar por la app.
Y si alguien se gasta mucha pasta comprando bayas o madera para la casa de los pitufos es su problema. Al fin y al cabo una persona adulta debería ser capaz de decidir si gasta dinero en eso vale la pena. Creo que en toda mi vida, sólo he pagado por algo así (con el juego Jetpack Joyride para tener monedas dobles XD).
Por otro lado, yo he comprado muchas apps. Sobretodo juegos. Como dice Lynze en el comentario anterior, si me voy a pasar horas y horas con el juego, vale la pena.
Debo confesar que muchas veces también he pagado por auténticos truños. Por suerte, ahora Apple (y supongo que Google también) lo pone más fácil a la hora de devolver productos digitales.
Igualmente, creo que la gente de carácter más «tecnológico» entendemos que toda app o juego tiene un trabajo enorme detrás y que eso hay que pagarlo. La gente que sólo tiene el móvil para el Whatsapp y el Facebook, no entiende que hay que pagar por una app. Esa gente normalmente tiene un móvil de útlima generación, pero porque la operadora de turno «se lo ha dado».